El gran autor argentino cuenta un diálogo con Ernesto Sábato: “Tuve una conversación, me dijo algo muy justo: siempre se dice que Cervantes escribía mal, que Dostoievski escribía mal. Pero si ese escribir mal les ha servido para dejarnos El Quijote y Crimen y castigo, entonces no escribían tan mal, escribían lo necesario para sus fines.